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Capítulo 1: Leik Light
Cerró sus ojos volviendo a suspirar. Realmente ella sabía lo que le pasaba, lo que sucedía era que..Su reflexión fue interrumpida por el rechinar de la puerta abriéndose. Automáticamente ésta entre abrió sus ojos observando desafiante y serena al sujeto que se había introducido en su habitación. Tardó unos segundos en aceptar al intruso que había entrometido su peculiar situación. Y con un tono distraído y sin aparente cambio en su situación pese a estar semidesnuda, le dió una "bienvenida" a su manera.
- Ah. Eres tu, Lelouch -Lo único que se había inmutado casi imperceptible ante la intromisión de aquel chico de estatura media había sido el rostro de la chica. El cual había tomado un tono rojizo oscuro camuflado por la penumbra de la habitación. La chica parecía tener su mirada fija en cada ápice del cuerpo del chico. Por su uniforme este era menor que ella. Ya que aún llevaba la camisa de la secundaria. Con el símbolo del remolino en azul. Por lo demás el cuerpo de Lelouch estaba perfectamente formado aparentando unos 17 años. Su pelo de color negro azabache, algo largo y desordenado le daba un toque dulce y atractivo. Acompañado por sus ojos de color violeta y su rostro algo infantil a la par que maduro.
Neik enarcó un poco una de sus cejas al desviar su vista al pantalón del chico que inusualmente, eran unos vaqueros que hacían denotar demasiado bien su figura. La chica desvió su mirada estremeciéndose levemente rozando sus piernas, observando ahora el equipo de música.
- ¿Y bien? ¿Qué has venido a hacer aquí? Llevabas mas de una decena de días sin regalarme tu presencia por mi habitación...- El tono de Neik aunque indiferente, denotaba un pequeño reflejo de reproche y enfado.
El chico dibujó una sonrisa que se esculpió irónica a la par que se arrojó sobre la cama quedando sentado justo a los pies de ella mirando su cuerpo a la par que acariciaba sus piernas con la yema de los dedos de su mano derecha.
- Vamos, no te enfades preciosa.... He tenido exámenes. No ha sido mi culpa... Sabes que de por mi estaría a todas horas contigo....- La chica se sonrojó un poco continuándo aún algo molesta por la tardanza del chico en ir a verla.
- Si, ya.... Eso dices siempre.... El caso es que nunca estas aquí....- La mirada de Neik se entristeció un poco más dando aún más notación a sus mejillas hinchadas.
- Eres demasiado tonta..... Si sigues así vas a acabar enamorándote.... Y eso que dijiste que nunca sentirías nada de nuevo por un estúpido chico....- El gesto del chico estaba endulzado al igual que sus palabras. Llevó sus dedos por encima del sexo de la chica unos segundos haciendo algo de presión al terminar riendo suavemente.
La chica reaccionó bruscamente incorporándose en la cama quedando casi sentada sobre la cama y con los ojos abiertos por completo, alternadamente.
- ¡¡¡Ya hemos hablado de esto muchas veces!!! Solo siento afecto por ti. No es amor. Eres diferente. Dejémoslo ya. Solo somos.... Algo extraño.....- La mirada de Neik estaba tan distinta a antes, casi llorosa. Justificando todo sin razón.
El chico se detuvo mirando al suelo algo fijo intentando no mostrar ningún sentimiento. Soltando un suspiro desde el corazón sordo e imperceptible. Apagado. Pero rompió la situación apretando sus dedos sobra la pierna de Neik y deslizándola hasta la parte inferior mientras que de golpe se arrojó sobre ella impactando directamente contra toda ella quedando apoyado sobre su otro brazo. Con su rostro a escasos centímetros del de ella mirándole directa y nesesitadamente a los ojos a ella, obligándole a mirarle.
- Tienes razón. Entonces.... Déjame hacer lo que necesites de mi....- Dijo el chico desechando sus sentimientos aunque quisiese cofesarlos. Desatándolos de la única forma que podía.
La chica tragó saliva sorprendida por la brusquedad del chico desviando de nuevo su mirada al suelo.
- No deberías hacer cosas que no eres capaz de llevar a cabo, Lelouch.... Eres un niño después de todo...- El chico cerró los ojos y la besó apasionadamente entrelazando su lengua hasta la campanilla de ella sin dejarla respirar mientras que ágilmente, separando un poco desabrochaba sus vaqueros bajándolos hasta formar parte del resto de la habitación. Apretando esta vez su ropa interior con su miembro luchando con fuerza por estar completamente erecto contra el sexo solo protegido por la de la chica.
Se despegó del beso jadeando.
- Sabes perfectamente que no soy un niño cualquiera.... Neik..... Y que contigo si soy cap...- Se calló de momento dejándose llevar por lo que sentía mirándola a los ojos. Bajó con la punta de sus dedos las braguitas de neik y su ropa interior de una vez dejando al descubierto su sexo acercándose lentamente al rostro de neik a ritmo lento y sin dejarla de mirarla a los ojos.
La chica estaba temblorosa y sus labios aun mas. Su corazón latía mas fuerte que nunca y realmente se sentía tan extraña..Que de haberle preguntado alguien que sentía no hubiera sabido que decir. El chico puso su sexo en la entrada del de ella metiéndolo suave y lentamente pero sin detenerse pese a sentir un pequeño obstaculizo hasta llegar al fondo del sexo de Neik. A la par que choco sus labios deteniendo el temblor de los de ella que le correspondió torpemente a la vez que se estremecieron bajo el cuerpo de Lelouch. Cerrando sus ojos ante la entrecerrada mirada de Lelouch.
- ¿E-estás bien? - Preguntó tartamudeante Lelouch esperando nervioso la respuesta de la chica.
- S-sí....- Susurró la joven tímidamente. Lelouch sonrió y comenzó a besarla apasionadamente aumentando el ritmo de los movimientos de su cadera contra el sexo de la chica, fusionando sus cuerpos a la vez que los gemidos de Neik se fundieron con el sonido de la minicadena que los camuflaba.
La noche se adrentró más hasta que los chicos exhaustos dieron fin a su madrugada uno al lado del otro. Al terminar Lelouch se sentó en la cama volviéndose a colocar su ropa inferior, observando la ropa azul de la cama teñida ahora de un rojo sangre manchando por algunos fluidos mas trasparentes.
- ¿Sigues pensando que soy un niño pequeño incapaz de hacerlo....? - Preguntó el chico con una sonrisa amplia y divertida.
- Lo retiro completamente..... Ha sido in-increíble.....- Tartamudeó risueña sintiendo un golpe en el pecho. Que le hizo cambiar la sonrisa y ponerse algo seria.
El chico notó el cambio de la chica entristeciéndose levemente por aquello tumbándose en la cama junto a ella rodeándola con sus brazos.
- No seas tonta Neik.... Yo.... Y-yo....- El chico tragó saliva mirando hacia el pecho de la chica para volver luego con una mirada decidida y temerosa a sus ojos.
- Te am.....- El dedo índice de la chica tapó las palabras que el chico llevaba toda la noche intentando decir con tan solo un gesto.
- No estropeemos esto tan bonito que tenemos... ¿Quieres?..... No tapes con mentiras lo importante que eres para mi...- No es una mentira, pequeña...ojalá fuese mentira. Pero te amo a rabiar. -Neik comenzó a llorar desconsolada negándose a creer las palabras del chico negando con la cabeza.
- Lo siento Lelouch.... Pero ya sabes que no puedo enamorarme.... Eres mi persona especial... Más que un amigo... Lo hemos sido siempre.... No lo cambies ahora...No quiero sufrir tanto otra vez...-El chico devolvió el gesto de Neik, callándola.
- No es una mentira. Yo también te he dado mi primera vez...- sacó de su bolsillo derecho del pantalón una especie de collar. Tallada la cadena en negro, con pedacitos de diamante por toda ella y en el centro, un gran símbolo, de color morado y azul: Leik.
- Lo mandé tallar...hace algunas semanas, aunque al final acabé haciéndolo yo. Está hecho de mi poder también y mis sentimientos...Si algún día me marcho, y no te amo, se romperá. Al contrario, los colores se intensificarán hasta que vuelva yo a ti...te amo, tonta. Y no sabes cuanto....- terminó sellándola los labios con un gran beso dulce y apasionado.
- No te abandonaré...- Lelouch halló las manos de Neik y las apretó, hundiéndose ambos en las sábanas. - Hay que dormir...pero qué sepas que me tendrás toda la noche aquí, junto a ti.
Neik no pudo evitar sonreír ante las palabras de Lelouch confiando finalmente en sus palabras finalmente. [color#29313d]- T-te amo Lelouch... -[/color] Fue capaz de susurrar tras su gesto tímidamente.
- Y yo a ti, Neik. - se mostró sonriente, y confiado. Colocándola el collar en su frágil cuello. La estrujó contra él.
La joven se aupó sobre el agachándose a mirar bajo la cama estrujándolo un poco con su cuerpo. Cogió una pequeña venda de color negro y la partió con los dientes por la mitad, atando una de las partes en forma de venda en la muñeca izquierda del chico con cariño.
- Esta venda lleva muchos años conmigo..... Quiero que lleves tu la mitad en la izquierda y yo la otra en la derecha..... Y que nunca nos la quitemos..... Mientras nos amemos....- En los ojos de Neik sin darse cuenta, un brillo rojizo se había marcado junto a su sonrisa, brillante y feliz.
Lelouch se quedó algo perplejo, reprimiendo algunas de sus lágrimas y asintiendo, refugiándola en él.
- Entonces nunca se romperá...- cerró sus ojos, poco a poco, a la vez que, los dos enamorados se dormían plácidamente.
- Te amo Neik...- susurró entre sueños.
Neik a su vez se quedo dormida en su pecho sonriente. Si Lelouch y sus sentimientos. Eso era lo que la había tenido distraída de sus dibujos. El no tenerlo a él... El no poder expresar su amor. El reprimirlo por miedo. Eso era lo que la impedía dibujar como ella hacia. El negar la verdad. Pero finalmente, sus sentimientos se han encargado de ellos. Les han juntado, y jamás podrán separarles, pase lo que pase...es una enseñanza cómo nunca se debe de dar por perdido una cosa. Si la amas, atraviesa todo lo posible por llegar hasta ella.
La noche pasó inalterable por la academia. 6 horas de descanso hasta que el móvil de Neik marcó las 11:30.
Acompañado por los rayos de sol que hicieron abrir los ojos a la joven lentamente. Comprobando que estaba sola en la cama.
- ¿Lu-Lulu? - El chico apareció algo envuelto en sudor por la puerta de la habitación con un par de cruasanes aguantados en su brazo contra su pecho y otro en su boca.
Se sentó sobre la cama y tragando el suyo en sus labios le abrió y dio uno a la chica.
- Perdona linda... ¿Cómo dormiste? Me levanté a ducharme y traerte el desayuno..No creó que te despertaras tan pronto.... Después de todo debes de estar agotada... ¿No? - Le dijo sonriendo mientras le acariciaba la mejilla.
La chica hinchó sus mofletes un momento cogiendo el cruasan y tirándoselo contra él mientras sonreía.
- ¡¡¡Aiiii jajaja me has asustado idiotaaa!!! - Rió divertida sintiendo como su corazón se sentía enamorado y sosegado a la par que acelerado.
Cogió el cruasan con delicadeza, mientras reía a la par de ella.
- Neik...tan tonta como siempre. ¿Pensé que me iba a ir o algo así? No lo haré...- la depositó un beso y una caricia, mientras depositaba el cruasan en la mano de ella.
- Además, un cuerpo tan frágil como tuyo debe descansar mucho, ¿no? Ayer te forcé mucho, ¿no es así....? - rió con algo de nerviosismo.
Las mejillas de la chica tomaron un tono completamente rojizo ahora iluminados por lo rallos de sol que chocaban contra su rostro y sus cabellos anaranjados.
- A-ah.... ¡No digas esas cosaaas! ¡¡¡Idiotaaaaa!!! No ha sido para tanto..... - La chica llevó su mano hasta su cuello sintiendo un pequeño dolor al igual que un poco de agujetas en sus costillas, cinturas y caderas al incorporarse...
- Va-vale si lo es.... Fue.... Tan umpf...- La chica lo miró desviando de nuevo su mirada y mordiéndo nerviosa el cruasan
Lelouch tumbó a la chica de nuevo, para luego posicionarse a su lado.
- Venga anda...- acercó algunos cruasans más para ellos, mirando como mordía el cruasan la chica.
- Uuh, parece que duele ese mordisco...espero que no me hagas eso a mí eso, ¿eh? - se tumbó, para estar a la altura de ella.
- Si tanto nos gustó, si tanto amor derrochamos, habrá que hacerlo más seguido, ¿no...? Además...no te desagrada que duerma contigo, ni a mi contigo. Demasiado tiempo sin ti...- susurró al oído de Neik, totalmente dulce pero deseoso a la vez.
- Un poco tarde, ¿no crees? - Dijo mirando los mordiscos no tan fuertes pero si marcados en sus hombros.
- La verdad no te voy a decir que no.... Te he necesitado demasiado tanto tiempo.... He dormido tan bien por una vez...- La chica sonrió pensando en lo que sentía.
- Supongo que no es tan malo... Estar enamorada... Jajaa - Su sonrisa se hizo mas amplia y sincera que nunca. Se acercó inesperadamente a el besándole y se puso de pie estirándose bastante.
- ¡¡¡Ahhhhh!!! Bien, voy a hacer algo que debí hacer hacer mucho...- La chica escaló ágilmente por su escritorio subiendo hasta alcanzar su estantería bajando las fotos de Alan y ella, dejándolas caer al suelo de la habitación y bajando luego de un salto tirándolas a la papelera.
- Peeeeerfeecto jajaja. Nanana~~ - canturreó feliz, bailando levemente.
- ... - No supo que decir. Se quedó pensativo algunos momentos, una mezcla entre necesidad y felicidad abrumante. Sin pensárselo mucho, se lanzó sobre ella, poniéndola en la pared y besándola con algunas lágrimas en los ojos, toquetéandola todo su cuerpo y luego abrazándola. No dejándola ni siquiera un segundo pensar ni sin él.
- Crearemos nuevos recuerdos...juntos. Guardaremos entre cristal todos nuestros momentos juntos...- alguna pequeña lágrima se deslizó tras Lelouch.
- No pude imaginar como era tan grande mi amor por ti...ahora lo sé. No te quiero dejar ni un segundo sola...me mudaré aquí, contigo, mi corazón es tuyo, mi niña chiquitita...- intentó de nuevo ocultar sus lágrimas, para luego tirarla a la cama y ponerse encima de ella, recordando la escena de anoche y besándola con total seguridad, con dulzura y pasión, uniendo sus manos a las de ella y apretándolas.
- Esto es tan especial...- murmuró entre el beso. Neik lo abrazó sonriendo y ese fue el principio de una primavera decisiva para ella. Los recuerdos con Lelouch se fueron creando a cada momento.
La pregunta es.. ¿Podrá seguir todo siendo tan perfecto esta primavera?
Hasta la próxima lector...