Kiryu apareció al lado de el, sentado. - ¿Sabes...? Te he enseñado muchos jutsus, muchas cosas....pero jamás te he llegado a enseñar algo de la vida. Sentimientos...es lo que hace realmente al mundo seguir y florecer cada vez más, hijo. - pasó su brazo por él y le arrinconó contra si mismo. - Debería empezar ahora...en una bella noche como esta.

- A mí tambien, en cierta parte..pero yo ya soy un "viejo"...- reí ligeramente. - Debes de decirme tú. Y luego yo. Sabes que siempre debes de contarmelo todo...porqe sabes que siempre estaré aquí.

- ¿Te acuerdas lo qué sucedió con el Kyubi? Eso es malo, muy malo...ha matado a miles de personas...- tragó saliva durante algunos segundos. Temía por la respuesta. - ¿Te sentiste bien al...ver aquella sangre, esos destrozos? ¿Te gustaría a ti hacer eso? ¿Destrozar a miles de personas por diversión? ¿Por odio?

Suspiré algo confuso. - Hijo...se sincero conmigo. - le revolví el pelo cariñosamente. - No te voy a juzgar. Es más, te ayudaré. Es peor alimentarte con el odio que va creciendo en tu interior, es mejor contarselo a alguien...explayate. Dime que sentiste...todo...soy todo oídos - le miré fijamente, con una sonrísa.

Le miro con una sonrísa plácida en la cara. - Entonces, cuéntame como fue cambiando tu vida desde ése punto, el bien y el mal, como cambiaron para ti...

Me quedé pensativo y le besé en la frente, desordenándole lentamente el pelo. - Ya veo...- suspiré levemente, levantándome junto a el y dejarle de pie y yo alejarme un poco. - Creo que pronto tendrás una misión importante en el examen Chunnin...así que...- le sonrió levemente. - Creo que si hay odio en tú corazón...vamos a descrubrirlo ahora en un combate. -

Cerró sus ojos, concentrándote. - Al ascender a Chunnin, tendrás alguna cosa nueva...sórprendeme. - abrió los ojos y en ellos se vio un color algo rojizo. - Esta vez...iré en serio. Muy en serio. - sacó una especie de kunai algo raro y poco común.

Observó el kunai recién sacado por Kiryuu, era diferente a los que usamos día a día.
Aún así no le di mucha importancia, con lo que empecé a hacer mi primer movimiento.

Hyōton: Tsubame Fubuki!
De la nada, alrededor mio, salían un grupo de agujas de hielo con forma de golóndrinas.
Esta técnica siempre se ha usado para lanzar las agujas al instante, pero por el momento yo las dejo levitar por alrededor de mi cuerpo.

-No me ganarás.

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OFF:

Hyōton: Tsubame Fubuki: Crea un grupo de agujas de hielo con forma de golondrinas en miniatura, que el usuario lanza a su oponente. Estas agujas pueden cambiar de dirección en el aire y mutilan al oponente con sus alas afiladas. Este jutsu puede ser eliminado mediante técnicas de Fuego.

Kiryu se paró en seco cuando iba a realizar algunos sellos. - ... - se concentró algo. - Van atacar a Kumo, hijo. - tiró el kunai y llevó su mano al hombro de su pupilo. - ...¿Te apetece defenderla? Son muchos...- presentió sus chakras bastante elevados. - Debemos hacer algo.

Dudé durante un momento. - Hijo...- apoyé mis manos en sus hombros. - ¿Seguro que quieres defenderla? - dije algo seco y decidido. - Prueba a atacarla junto a los demás...quizá así puedas sentir lo qué quieres...experimentar las muertes, la guerra...- murmurré algo confuso. - Piénsatelo...