Sama y dono se utilizan como san. La diferencia es que estos términos son honoríficos. Es decir, se usan para demostrar respeto.
Por ejemplo: sama se utiliza al escribir el nombre del destinatario en las piezas postales. Igual que dono, pero en este caso sólo en los documentos de carácter oficial.
En el lenguaje hablado, sama, se utiliza para llamar a los clientes. Por ejemplo: en una tienda, los empleados se dirigen a los clientes con el apelativo “okyakusama” que significa señor o señora cliente. Okyaku = cliente.
El término “dono” ya no existe en el lenguaje hablado ya que es una palabra muy antigua. Aunque la podrán escuchar en las películas de la época de los samurai.
Bueno, si tienen alguna duda respecto al uso de estos vocablos, pueden dejarme un comentario.